Horas de Brigitte Jones, horas de Sex and the City y sigo sin entender muchas cosas, aunque se escriban guiones basados en historias verdaderas, mi vida nunca se va a parecer a una película, aunque disfrutaría en este momento de un corte con disolvencia a alguna otra situación que no sea esta.

Estoy en casting de emociones y no existe ninguna que sirva para el papel, lastimosamente voy a tener que seguir con este caracter que lleva horas comiendo, sin un baño, harta del aquel sonido espantoso que brinda el mundial (por que no les regalaron un tambor en lugar de cornetas) y tratando de encontrar algún sentimiento en el fondo de una película.